En la jornada sobre metodología BIM para infraestructuras ofrecida esta mañana por la CAC-Asprocon, el presidente del grupo de Contratistas, Manuel Fernández, encargado de la presentación del curso, que congregó a más de medio centenar de empresarios, ofreció datos del Observatorio de Licitaciones BIM creado en mayo de 2017, que analiza aquellos pliegos de licitación que incluyen requisitos BIM entre sus cláusulas, desde un punto de vista cuantitativo y cualitativo.

Dicho Observatorio de Licitaciones BIM, detalla en sus conclusiones lo siguiente:

       El grueso del total de la inversión se ha producido en el primer trimestre del 2018 con un valor acumulado total de 142,28M €, lo que supone casi el 24% de la inversión total en el periodo que abarca desde enero de 2017 a septiembre de 2018 (581,73 M €).

       En el segundo trimestre del 2018, en el sector de infraestructuras se ha producido el 50% de su inversión total (162,14M €), y en el transcurso de dicho año la inversión  alcanzó un valor acumulado de 304,50 M€, superando al valor acumulado del año 2017 que fue de 277,22M €, lo que indica que las distintas administraciones públicas apuestan por incluir la metodología BIM en proyectos cada vez más importantes.

       A nivel estatal, durante los primeros nueve meses del año, se han invertido 27,9M € (27% de su valor total acumulado),

       Se aprecia en general una mayor presencia de la metodología BIM en la administración autonómica (64% en términos del total del valor acumulado de las licitaciones). Así, en el primer semestre del 2018, las administraciones autonómicas han invertido 209,3M € (51% de su valor total acumulado), valor que disminuye notablemente en el tercer trimestre del 2018.

       A nivel local se aprecia una alta inversión durante el tercer trimestre del 2018 de 49,6M € (90% de su valor total acumulado).

       Además, cada vez de forma más habitual, la metodología BIM ha cruzado la fase del diseño para empezar a aplicarse a otras fases del ciclo de vida como es la ejecución.

Para Fernández, todos estos datos nos demuestran por dónde se dirige el sector y por dónde deben focalizar las empresas sus actuaciones como forma ineludible de adaptarse a un futuro que ya es presente y asegurar así su supervivencia y competitividad.

 

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